El candidato presidencial por la libre postulación, Ricardo Lombana, aseguró que tras las revelación de los detalles de la planilla 172 se demuestra que todos los partidos políticos le han mentido al país y que quieren seguir haciéndolo, por lo que invitó a los panameños a sumarse al movimiento "Otro Camino Panamá" y "acabar de una buena vez con tanta sinverguenzura". "Haremos lo que sea necesario, lo que esté al alcance de la ley para que quienes han abusado de nuestros recursos sean investigados y que nunca más se asigne un dólar a una persona que no trabaja", expresó. 

Lombana durante su recorrido  por  varias comunidades de Arraiján y La Chorrera 
sostuvo que la décima provincia ha colapsado en cuanto a infraestructura de servicios públicos y por la falta de buenas vías y formas de transporte efectivo hacia y desde la ciudad capital. Sin embargo, manifestó que se pueden construir 17 autopistas si se quiere, pero "la solución de fondo es desarrollar Panamá Oeste con inversión e incentivos para que, poco a poco, sea menos necesario buscar oportunidades de empleos en la ciudad de Panamá y que haya servicios de salud y de educación de buena calidad, de manera que la gente se pueda quedar en el área".

En cuanto a las medidas inmediatas a tomar, de ganar la Presidencia, dijo que revisará si en el presupuesto ya aprobado hay asignaciones para pagos de planillas brujas u ocultas, y de ser así, inmediatamente tomará las acciones requeridas para que se aplique el fallo de la Corte Suprema de Justicia que declaró ilegal que los diputados manejen fondos públicos.

"En los próximos presupuestos generales del Estado elaborados por nuestro gobierno y enviados a la Asamblea Nacional no se incluirá ni un dólar para pago de botellas de familiares, de personas allegadas, o de personas que simplemente están por favores políticos o no trabajan. Eso se va a acabar, no porque yo lo diga, sino porque es un delito y un presidente no puede permitir que se cometan delitos con dinero de los panameños, mientras no hay medicinas, no hay escuelas, y no hay calles ni veredas", declaró a un grupo de periodistas que lo abordó en El Tecal.

Anunció también que su gobierno va a radicalizar las penas y la sanciones contra la corrupción, delito que no prescribirá, y que se impulsará la inhabilitación de funciones públicas para funcionarios condenados por corrupción, o sea: la llamada muerte civil.

Explicó, asimismo, que desde el día uno de su gobierno arrancará el proceso constituyente que le va a dar a Panamá nuevas reglas del juego, entre las cuales destacan la elección de  menos diputados, la prohibición expresa de manejo de fondos por parte de dichos funcionarios, y una nueva forma de elegir a los magistrados.